A tan solo 8 km de Pacha Mama, a 15 minutos en auto, se encuentran las famosas excavaciones arqueológicas de Pompeya, donde se puede disfrutar de una excursión única inmersa en la historia.

Durante la erupción del volcán Vesubio en el 79 d.C., Pompeya fue golpeada por una gigantesca nube de gas venenoso, cenizas, lapilli y piedras incandescentes que se asentaron sobre la ciudad, enterrándola unos siete metros. Algunos de los habitantes, sintiendo la inusual extensión de la catástrofe, intentaron huir al mar.

Pompeya todavía muestra su encanto atemporal y el área arqueológica cubre más de sesenta hectáreas de ruinas. A la entrada de la ciudad se encuentran los restos de hoteles, posadas y, más adelante en el centro de la ciudad, comercios de todo tipo desde panaderos hasta lavanderías, desde zapateros hasta herreros, desde verduleros hasta pastelerías, en algunos casos todavía decorados con carteles pintados. Y también casas particulares, altares, pequeñas capillas, balnearios y grandiosos edificios públicos. Estos últimos se encuentran reunidos en tres centros principales: el Foro Civil con el templo de Júpiter, la Basílica, el mercado cubierto, el edificio de Eumachia, el Foro Triangular y el distrito de los teatros, con el antiguo templo dórico y el de lside, el gimnasio, los teatros grandes y pequeños y finalmente la zona del Anfiteatro.